Hoy me gustaría hablar de un problema que afecta al 6% de la
población Mundial y que cada vez se diagnostican más casos en España, la
adicción al sexo.
La adicción al sexo o sexo compulsivo se refiere a
un conjunto de conductas con formato repetido y de carácter compulsivo
dirigidas a mantener relaciones sexuales, habitualmente con diferentes parejas,
con el fin de satisfacer un intenso y frecuente deseo sexual.
Cuando el deseo de mantener relaciones sexuales es demasiado
frecuente y la búsqueda de satisfacción del mismo ocupa gran parte del día a
día, o interfiere de forma significativa trayendo consigo consecuencias
negativas, es muy probable que hablemos de adicción al sexo.
La adicción al sexo es un trastorno que tiene diversas
causas. Estudios recientes han encontrado algunos trastornos que comparten
ciertas características con la adicción al sexo.
La televisión ha aprovechado
y ha retratado este tipo de trastorno, sobre todo destaca el personaje de Samantha
de la serie Sexo en Nueva York. En la literatura destaca Dorian Grey.
Perfil de la persona adicta al sexo
El adicto al sexo se define por su comportamiento,
el cual es fruto de sus deseos. De forma general, la persona adicta al sexo
mantiene una actividad sexual excesiva, habitualmente promiscua e
incontrolada. Además, suele presentar las siguientes características:
- Varón joven.
- Problemas de control de impulsos, falta de concentración, etcétera. La satisfacción sólo la obtienen en el momento, sintiéndose posteriormente culpables por haber mantenido la relación.
- Persistente en su conducta a pesar de las consecuencias negativas.
- Tienen pensamientos sobre temas sexuales casi de forma constante y de manera intrusiva.
- No es capaz de controlar su impulso sexual.
- Promiscuo, su conducta sexual es ocultada mediante engaños, mentiras.
- Frecuentemente recurre a la masturbación, encuentros con desconocidos, cibersexo, pornografía, prostitución…
- El tiempo dedicado a la búsqueda de sexo le puede llevar al aislamiento, además de traerle problemas económicos y familiares.
- Baja autoestima.
Comentarios
Publicar un comentario